Meditaciones 23 de abril

 

23 de abril, La meditación para las Mujeres que aman demasiado, Robin Norwood:

Cierto tipo de adicciones lleva a la gente a escoger profesiones que son un reflejo de su enfermedad, ya que a menudo los adictos suelen utilizar sus profesiones como defensa contra su adicción. Ocultarse tras el rol de experto puede ser una buena manera de defenderse contra el dolor intenso y los secretos más profundos. ¿Cómo es posible tener un problema en el terreno en que uno es experto? Es muy común que las adictas a relaciones afectivas se sientan atraídas hacia profesiones de servicio a los demás. Muchas de nosotras elegimos profesiones que implican ayudar a otros porque nosotras mismas estamos heridas. Utilizamos así nuestro trabajo como manera de centrar la atención en la vida y los problemas de los otros para evitar enfrentarnos con los nuestros. Cuando tenemos asegurada nuestra recuperación, tenemos todo lo necesario para ofrecer a los demás.

 


Integridad

Una integridad que emerge guía nuestra vida. Aunque cometamos errores, estamos más dispuestos a asumir la responsabilidad sobre nuestras acciones. Aprendemos que no tenemos que ser perfectos para vivir una vida espiritual. Cuando practicamos el Tercer Paso con la mente y el corazón abiertos, descubrimos resultados que sobrepasan ampliamente nuestras expectativas.

Funciona Como y Porque (Tercer Paso)

23 de abril

Meditaciones para mujeres que hacen demasiado, Anne Wilson Schaef

Culpabilidad

Disimular es algo muy seguro. A cambio de hacerlo puedes obtener un precio desmedido... el kilo de carne del mercado.

Colette Dowling

Solemos ser expertas en culpabilidad. Ciertamente lo hemos aprendido de nuestras maestras. Incuestionablemente y con gran tenacidad hacemos nuestras tareas sin una queja ni un reproche.

Sin embargo, vamos armadas con nuestros suspiros, los dientes apretados, un aspecto patético de resignación y nuestros hombros caídos. Nuestra frase favorita es: «Está bien», pero realmente no es lo que queremos decir. Una de nuestras capacidades es la de sufrir, ¡y lo hacemos tan bien! Obtenemos nuestro kilo de carne, pero perdemos en ello nuestras almas.

Dime: ¿Vale realmente la pena? ¿Estamos listas para abandonar el juego de la culpabilidad? Se hace infinitamente aburrido.

23 de abril, Meditación Diaria para Mujeres, libro: Cada día un nuevo comienzo:

Cuando dejas de ayudar a los demás, comienzas a morir.

Eleonor Roosevelt

Seamos hoy conscientes de todas las oportunidades que tenemos de ofrecer nuestra ayuda a otra persona. Observemos también la gran cantidad de ocasiones en que un amigo, e incluso un extraño, solicitan nuestro auxilio. Las oportunidades de contribuir al curso de la vida son infinitas. Nuestra propia vitalidad se deriva de nuestra disposición a colaborar con los demás, del hecho de contribuir con nuestros talentos y nuestros corazones al viaje diario de quienes nos rodean. El programa nos ayuda a saber que Dios vive en nosotras y entre nosotras. Vivir significa compartir mutuamente el espacio, los sueños y las penas; aportar nuestros oídos para oír, nuestros ojos para ver, nuestros brazos para abrazar y nuestros corazones para amar. Cuando nos cerramos a los demás destruimos lo que cada una de nosotras necesita dar y recibir para enriquecer la vida.

Cada una necesita lo que la otra pueda dar. Cada persona con la que nos relacionemos hoy necesita nuestra especial ayuda. ¡Qué maravilla colección de invitaciones me espera hoy!

23 de abril, El lenguaje del adiós de Melody Beattie

Abrámonos al amor

Permitirnos recibir amor es uno de los más grandes retos que enfrentamos en la recuperación.

Muchos de nosotros nos hemos bloqueado de recibir amor. Podemos haber vivido con gente que usaba el amor para controlarnos. Estarían con nosotros, pero a un alto precio para nuestra libertad. El amor se nos daba, o se nos retiraba, para controlarnos y tener poder sobre nosotros. Nosotros no nos sentíamos seguros recibiendo amor de estas personas. Podremos habernos acostumbrado a no recibir amor, a no reconocer nuestra necesidad de amor, porque vivimos con gente que no tenía verdadero amor para dar. En algún punto en la recuperación reconocemos que nosotros, también, queremos y necesitamos ser amados. Podemos sentir embarazosa esta necesidad. ¿A dónde vamos con ella? ¿Qué podemos hacer? ¿Quién nos puede dar amor? ¿Cómo podemos determinar de quién fiarnos y de quién no? ¿Cómo podemos dejar que los otros se preocupen por nosotros sin sentirnos atrapados, abusados, asustados e incapaces de preocuparnos de nosotros mismos? Aprenderemos. El punto de inicio es el sometimiento, a nuestro deseo de ser amados, a nuestra necesidad de que nos mimen y nos amen. Tendremos cada vez más confianza en nuestra capacidad para cuidar de nosotros mismos con la gente. Nos sentiremos suficientemente seguros para dejar que la gente se preocupe por nosotros; tendremos cada vez más confianza en nuestra capacidad para escoger a la gente que es segura y que nos puede dar amor. Quizá al principio necesitemos enojarnos, enojarnos porque no se están satisfaciendo nuestras necesidades. Después, podemos sentir gratitud por esas personas que nos han enseñado lo que no queremos, por aquellas que nos han asistido en el proceso de creer que merecemos ser amados y por aquellas que han entrado a nuestra vida para amarnos. Nos estamos abriendo como las flores. A veces duele que los pétalos se abran. Alégrate. Nuestro corazón se está abriendo al amor que está ahí y que seguirá estando ahí para nosotros. Sométete al amor que está ahí para nosotros, al amor que la gente, el universo y nuestro Poder Superior nos manda. Sometámonos al amor sin permitir que la gente nos controle o nos impida cuidar de nosotros mismos. Empieza por someterte al amor a ti mismo.

Hoy me abriré al amor que está ahí para mí. Me permitiré a mí mismo recibir el amor seguro, sabiendo que puedo cuidar de mí mismo con la gente. Estaré agradecido con toda la gente de mi pasado que me ha asistido en el proceso de abrirme al amor. Reclamo, acepto y doy gracias por el amor que me está llegando.

 

 

Comentarios

Entradas populares de este blog

Meditaciones 24 de junio

Meditaciones 9 de abril

Meditaciones 15 de septiembre