Meditaciones 11 de junio

 

11 de junio, La meditación para las Mujeres que aman demasiado, Robin Norwood:

Nunca des por sentado que la adicción a una relación afectiva no va a matarte. Es una de las que producen más estrés, y todas sabemos que el estrés mata. Pon toda la voluntad que haga falta para recorrer toda la distancia necesaria y así lograr tu recuperación. Estás salvando tu vida.

 


Los principios en acción incluyen la rendición de cuentas, la responsabilidad, la humildad, la paciencia, la tolerancia, la sinceridad, la unidad y la perseverancia, entre otros. Los miembros que practican estos principios crecen y cambian como individuos y ayudan a fortalecer a su grupo habitual. Los grupos habituales fuertes ponen de manifiesto estos principios en sus reuniones de trabajo y de recuperación.

NAWay abril2007

11 de junio

Meditaciones para mujeres que hacen demasiado, Anne Wilson Schaef

Belleza

El adorno no es otra cosa que un reflejo del corazón.

Coco Chanel

Todo el mundo se fija mucho en cómo se visten las mujeres: «Deberíamos llevar trajes de tres piezas, exactamente como los hombres y vestirnos para el éxito.» «Las mujeres que son violadas lo estaban pidiendo por la manera como estaban vestidas.» «A los hombres les gustan las mujeres que se visten de manera femenina. Les hace sentirse masculinos.» ¿Puede así extrañar que a veces nos sintamos confusas acerca de lo que parece que es correcto ponernos? ¿Qué pasa si la manera de vestirnos es simplemente un reflejo de nuestro corazón? ¿Y qué tal si nuestro principal criterio de belleza es sentirnos bien con nuestros cuerpos y reflejar lo que somos? ¿Y si llevamos colores porque nos gustan y no porque son «nuestros colores» o nos hacen parecer más delgadas? Esto nos abre toda clase de posibilidades, ¿verdad?

Si me vistiese para reflejar mi corazón, ¿qué llevaría?

11 de junio, Meditación Diaria para Mujeres, libro: Cada día un nuevo comienzo:

Mi vida escucha la tuya.

Muriel Rukeyser

Nuestras experiencias nos enseñan que debemos ayudar a que otros encuentren su camino. Del mismo modo, las experiencias de éstos ayudarán a otros más. Debemos compartir nuestras experiencias. Y el programa nos ofrece la manera de hacerlo. El mayor honor que podemos concedernos mutuamente es la atención total. Cada una de nosotras desea ser oída, ser especial, ser reconocida. Y el reconocimiento bien puede ser el bálsamo que sane hoy la herida de alguien. Un nuevo día nos aguarda, un día lleno de oportunidades, de escuchar realmente a alguien que lo necesite. Y lo más sorprendente es que escucharemos un mensaje que resultará adecuado para nosotras en la situación en la que nos encontremos, un mensaje que bien puede guiarnos hacia una dirección nueva y mejor. La orientación que necesitamos está a nuestro alcance siempre que la escuchemos. Pero cuando nos dejamos atrapar por nuestro pequeño mundo de problemas y confusión, mezclamos los mensajes que tratan de llegar a nosotras y nos privamos de las muchas oportunidades de hacer que otra persona se sienta especial y necesaria para nuestra vida. Mi crecimiento se enriquece cada vez que concedo mi atención total a otra persona. Y este proceso se multiplica una y otra vez.

Hoy estaré junto a alguien que me necesite.

11 de junio, El lenguaje del adiós de Melody Beattie

Vayamos hacia delante

Por mucho que nos gustara, no podríamos traer a todo el mundo con nosotros en este viaje llamado recuperación. No estamos siendo desleales al permitirnos seguir adelante. No tenemos por qué esperar a que los que amamos decidan cambiar también. A veces necesitamos darnos a nosotros mismos permiso para crecer, aunque la gente que amemos no esté lista para cambiar. Podemos necesitar incluso dejar atrás a la gente en su disfunción o en su sufrimiento porque no podemos recuperarnos por ella. No necesitamos sufrir con ella. No sirve de nada. No nos sirve de nada quedarnos atascados porque alguien que amamos está atascado. El potencial para ayudar a los demás es mucho mayor cuando nos desapegamos, trabajamos en nosotros mismos y dejamos de tratar de forzar a los demás a que cambien junto con nosotros. Cambiar nosotros mismos, permitirnos crecer mientras otros buscan su propio camino, es como tenemos el impacto más benéfico sobre la gente que amamos. Nosotros somos responsables de nosotros mismos. Ellos son responsables de ellos. Los dejamos ir y nos dejamos crecer a nosotros.

Hoy afirmaré que es mi derecho crecer y cambiar, aunque alguien a quien ame pueda no estar creciendo y cambiando junto conmigo.

 

Comentarios

Entradas populares de este blog

Meditaciones 24 de junio

Meditaciones 9 de abril

Meditaciones 15 de septiembre