Meditaciones 24 de diciembre

 

🎇🎆

24 de diciembre,

La meditación para las Mujeres que aman demasiado, Robin Norwood:

Una vez que la autoaceptación y el amor por una misma han comenzado a desarrollarse y a hacerse carne en nosotras, estamos en condiciones de practicarlos conscientemente, sencillamente siendo nosotras mismas, sin tratar de agradar, sin actuar de determinadas maneras calculadas para ganar la aprobación y el amor de los demás. Pero nos acomete el desconcierto y un sentimiento de gran vulnerabilidad cuando estamos siendo y no haciendo, y dejar de representar el antiguo papel se nos antoja al principio como estar paralizadas. Finalmente, a su debido tiempo, nuestros auténticos impulsos amorosos tienen la oportunidad de hacerse oír, sentir y ser tenidos en cuenta.

 




Un mensaje navideño

Diciembre de 1970

Durante las Navidades nos darnos cuenta más claramente que nunca de que la gratitud es el más excelente atributo que podamos tener. Juntos, contemplamos nuestra suerte y reflexionamos sobre las bendiciones de la vida, del servicio y del amor.

En esta época enloquecida, nos ha sido posible encontrar una paz interior cada vez más profunda. Lois y yo nos unimos a todos los miembros del personal de la Oficina de Servicios Generales de AA para enviarles a todos y a cada uno de ustedes nuestros más calurosos votos; compartimos una fe segura de que el año que viene se contará entre los mejores que haya conocido nuestra Comunidad.

 Bill

24 de diciembre,

Meditaciones para mujeres que hacen demasiado, Anne Wilson Schaef

Causas/Dualismo

Los principales peligros de esta vida son las personas que lo quieren cambiar todo... o nada.

Lady Astor

¡Qué bien expresado! Lady Astor pone su dedo en el significado del dualismo y en el horror de estar atrapadas en él. Las personas que quieren cambiarlo todo suelen volverse implacables cuando focalizan su rayo láser sobre lo que creen que es justo.

Las personas que no quieren cambiar nada se han hecho tan insensibles hacia sí mismas y hacia los demás que pasan por la vida sin mirar a su izquierda ni a su derecha. Ninguna de las dos clases de personas hace mucho por ellas mismas o por los demás. Realmente, ambos grupos actúan a partir de un mismo enfoque egocéntrico.

¿Cuál es la tercera opción? La tercera opción es estar presentes a nosotras mismas y a los demás, aceptando aquellas cosas que no podemos cambiar, cambiando las cosas que sí podemos cambiar y conociendo cuáles son las unas y cuáles son las otras.

Cuando estoy atrapada en una «causa», me convierto en el problema. Cuando no hago nada por el mundo en el que vivo, yo soy el problema.

24 de diciembre,

Meditación Diaria para Mujeres, libro: Cada día un nuevo comienzo:

Sigue tu sueño…/ Si tropiezas, no te detengas / ni pierdas de vista tu objetivo, / sigue avanzando hacia la cima / pues sólo desde allí / podrás ver el panorama completo…

Amanda Bradley

 Hoy podemos reflexionar acerca de nuestra vida, echando luz sobre las cosas de algún un suceso y sobre la manera en que éste encaja en el mosaico de nuestra vida. Y esto continuará repitiéndose. Tropezamos y seguiremos haciéndolo. Gracias a ello, aprendemos acerca de nosotras mismas, de lo que nos hace tropezar y de los métodos para levantarnos.

 La vida es un proceso, un proceso de aprendizaje en el que necesitamos esos tropiezos para hacernos más conscientes de los pasos que necesitamos dar a fin de alcanzar la cima de nuestro sueño. Ninguna de nosotras pudo darse cuenta del papel que desempeñó éste en su pasado, pero ahora podemos verlo. Cuando caemos, debemos confiar en que ahora, como antes, nuestras caídas son hacia arriba y no hacia abajo.

Con el tiempo llegaré a apreciar el panorama completo. Diariamente veo una de sus partes. Estoy orgullosa de mi mosaico; sin embargo, mis tropiezos son necesarios para él.

24 de diciembre,

 El lenguaje del adiós de Melody Beattie

Pasando las navidades

Para algunos, las escenas, los signos y los olores de las navidades les traen un sentimiento de alegría y calidez. Pero, mientras otros se sumergen alegremente en la época navideña, algunos de nosotros nos hundimos en el conflicto, en la culpa y en un sentimiento de pérdida.

Leemos artículos acerca de cómo disfrutar las vacaciones, leemos acerca de la depresión de Navidad, pero muchos de nosotros aún no podemos figurarnos cómo atravesar la temporada navideña. No sabemos cómo es y cómo se siente tener una Navidad alegre.

Muchos de nosotros estamos divididos entre lo que queremos hacer en las festividades navideñas y lo que sentimos que tenemos que hacer.

Podemos sentirnos culpables porque no queremos estar con nuestras familias. Podemos experimentar una sensación de pérdida porque no tenemos el tipo de familia con la que querríamos estar. Muchos de nosotros, año tras año, entramos al mismo comedor en el mismo día festivo, esperando que este año sea diferente. Luego nos marchamos, año tras año, sintiendo que nos han fallado, sintiéndonos decepcionados y confundidos por todo ello.

Muchos de nosotros tenemos viejos recuerdos dolorosos que los días festivos disparan. Muchos de nosotros sentimos un gran alivio cuando terminan los días festivos.

Uno de los más grandes regalos de la recuperación es aprender que no estamos solos. Probablemente hay tantos de nosotros que se sienten en conflicto durante los días festivos como tantos que se sienten en paz. Estamos aprendiendo, por medio de ensayo y error, a cuidar un poco mejor de nosotros cada época navideña.

Nuestra primera tarea de recuperación durante las festividades navideñas es aceptarnos a nosotros mismos, nuestra situación y nuestros sentimientos acerca de la situación. Aceptamos nuestro sentimiento de culpa, nuestra ira y nuestra sensación de pérdida. Todo está bien.

No hay una manera perfecta o correcta de manejar las festividades.

Podemos encontrar nuestra fortaleza haciendo las cosas lo mejor que podamos, un año a la vez.

Esta temporada navideña, me daré permiso para cuidarme a mí mismo.

 

Comentarios