Meditaciones 1 de diciembre
1 de diciembre,
La meditación para las Mujeres que aman demasiado, Robin Norwood:
Un hombre descuidado e irresponsable puede ser un amigo encantador, pero es poco prometedor para una relación satisfactoria. Hasta que puedas darte permiso a ti misma para ser más libre y natural, lo necesitarás a él para que ponga diversión y emoción en tu vida.
Perfil de la pareja de un abusador
Lo que tú permitas es lo que continuará.
—Anónimo
Los abusadores tienen parejas que son extremadamente
responsables es común que los abusadores tengan parejas dispuestas a aceptar
más responsabilidad de la que les corresponde. Alguien tiene que hacer que las
cosas avancen, ¿cierto? Un abusador se siente atraído hacia ti porque eres
complaciente, lo cual hace que sus esfuerzos por controlarte sean mucho más
sencillos. Cuando tú cedes o aceptas la responsabilidad del asunto en cuestión,
eso refuerza al abusador y le da más poder. Como un abusador no quiere otra
cosa más que poder, queda satisfecho y existe paz temporal en la relación. La
paz en la relación es atractiva para ti y tú te esfuerzas por alcanzarla en
cada oportunidad. Una vez más, el patrón se refuerza ahora a través de tu
comportamiento.
Libro: Sí Él es tan bueno ¿Por qué me siento tan mal?
Avery Neil
1 de diciembre
Meditaciones para mujeres que hacen demasiado,
Anne Wilson Schaef
Seguridad económica
Realmente somos esclavas del coste de la vida.
Carolina Marín de Jesús
Todas nosotras tenemos que enfrentarnos al coste
de la vida. Existir es cada vez más caro, y vivir parece a veces como si sólo
se hiciera por obtener riquezas.
Hemos perdido las huellas de la diferencia entre
lo que queremos y lo que necesitamos. Todo se ha convertido en una necesidad.
Si no tenemos lo que pensamos que necesitamos, disminuyen nuestra autoestima y
nuestros sentimientos de autovaloración. Ya no podemos recordar lo que es
importante.
Nosotras somos importantes. Nuestros/as hijos/as
son importantes. Nuestras relaciones son importantes.
El planeta es importante. Nuestras vidas son
importantes.
Para que no olvidemos lo que somos, detengámonos
hoy y recordemos.
1 de diciembre,
Meditación Diaria para Mujeres, libro: Cada día
un nuevo comienzo:
Y no es lo que tú haces, querida / sino lo que
dejas de hacer / lo que le da un poco de jaqueca / cuando el sol se oculta.
Margaret Sanger
Una de las características completamente humanas
que todas compartimos consiste en esperar la perfección de nosotras mismas, en
tratar de alcanzar lo imposible en todas las tareas que realizamos. Debemos
regocijarnos por lo que hacemos bien. Cada vez que nos felicitamos por una
tarea bien hecha, nuestra confianza crece poco más. Nuestro grado de salud
emocional y espiritual, expresada en la confianza y la fe manifiesta en “el
proceso”, es la mejor manera de evaluar nuestra recuperación.
Debemos reconocer y celebrar nuestros puntos
fuertes, pues de esa forma se fortalecerán aún más. Asimismo, debemos practicar
la oración y escuchar a nuestra guía para desarrollar nuestros lazos con Dios,
pero sobre todo para ser capaces de darnos cuenta cuando la ayuda esté a
nuestra disposición. Podemos hacer lo que necesitemos con la ayuda de Dios.
El hecho de tener metas realistas para este día
o para todo el año es un signo de salud emocional, lo mismo que el de no
empantanarnos en lo que de momento no pudimos lograr. Lo que la mayoría de
nosotras necesita para pasar de su situación actual a un mejor estado emocional
es un cambio de actitud.
Para regocijarse por lo que he logrado no hay
mejor momento que el presente.
1 de diciembre,
El
lenguaje del adiós de Melody Beattie
Dejemos que la gente nos apoye
A veces necesitamos que nos contengan, que la
gente nos apoye.
Muchos de nosotros hemos sido privados de apoyo
y de consentimientos por tanto tiempo que podemos no darnos cuenta de que esto
es algo que queremos y necesitamos. Muchos de nosotros hemos aprendido a
bloquearnos o abstenernos de lo que queremos y necesitamos.
Podemos no buscar que se cubran nuestras
necesidades. Podemos estar en relación con gente que no puede o no quiere
satisfacer nuestras necesidades. O podemos estar en relaciones con gente que
estaría feliz de responder a una petición directa de parte nuestra.
Podemos tener que renunciar a algo para hacer
esto. Podemos tener que dejar ir nuestro papel de mártir o de víctima. Si
pedimos lo que queremos y necesitamos, y no se nos satisfacen esas necesidades,
no podremos castigar a la gente, o hacerlos después a un lado por habernos
decepcionado.
Podemos dejar ir nuestros miedos lo suficiente
para experimentar la intimidad que se dará cuando le permitamos a alguien que
nos ame y nos apoye. Podemos incluso tener que aprender, un día a la vez, a
estar felices y contentos. Aprender a dejar que los demás nos apoyen.
Hoy estaré abierto para identificar lo que
necesito de la gente, y pediré lo que quiera directamente. Dejaré que los demás
me apoyen.
Comentarios
Publicar un comentario