Meditaciones 20 de octubre

 

✿✿✿

20 de octubre, La meditación para las Mujeres que aman demasiado, Robin Norwood:

Para la mujer que ama demasiado, su enfermedad primordial es su adicción al dolor y la familiaridad con una relación poco gratificante. Es verdad que todo esto se origina en conductas de toda la vida que pueden tener sus raíces en la infancia, pero ante todo debe enfrentarse a sus conductas del presente para poder comenzar con su recuperación. No importa cuán enferma, cruel o indiferente sea su pareja; debe comprender que todo intento por cambiarlo, controlarlo o culparlo es una manifestación de su enfermedad, y que debe abandonar esas conductas antes de que mejoren otros aspectos de su vida. Su única tarea legítima es consigo misma.

 


Nuestras decisiones nos definen. Por ejemplo, la decisión de formar una familia implica dejar atrás la independencia que teníamos; la decisión de no tenerla significa que debemos encontrar otras maneras de sentirnos en contacto con la gente. La Séptima Tradición nos dice que todo tiene un precio, independientemente de la intención, y nos damos cuenta de lo cierta que es esta afirmación a medida que avanzamos en nuestra vida y en nuestra recuperación. Cada decisión que tomamos, buena o mala, significa que dejamos atrás otras opciones. Al pensar en nuestra vida, podemos perdernos en infinitas telarañas de «¿y si…?». El Cuarto Paso nos advierte del peligro de acabar atrapados en «un exceso de tristeza» como consecuencia. Logramos vernos no como éramos sino como estamos empezando a ser. NA nos ayuda a vivir con las consecuencias —y los beneficios— de nuestra transformación.

Vivir limpios, el viaje continua

20 de octubre

Meditaciones para mujeres que hacen demasiado, Anne Wilson Schaef

Conciencia del proceso/control

El tiempo es un sastre especializado en arreglos y cambios.

Faith baldwin

A menudo pensamos que «estamos a punto de conseguir ponerlo todo en orden», cuando la vida nos ofrece otra oportunidad de aprender. Muchas mujeres hemos aprendido a manejar nuestras vidas como manejamos nuestras casas. Hemos creído que podíamos gobernar el hogar como queríamos y que las cosas se mantendrían siempre iguales. Nos hemos sentido personalmente atacadas cuando una habitación tiene que ser pintada de nuevo, o cuando se estropea un electrodoméstico.

Hemos organizado nuestras vidas basadas en una noción estática del universo. Hemos creído que, una vez establecidas las cosas, nosotras quedaríamos igualmente establecidas en nuestras casas, en el trabajo y en nosotras mismas. Al intentar que nosotras y el universo permanezcamos estáticos, nos hemos preparado el camino de intensos momentos de frustración y fracaso. Nuestros intentos para controlar los procesos normales de la vida nos han cobrado su precio a nosotras y a las personas que nos rodean.

Soy un proceso. La vida es un proceso. Los cambios forman parte del proceso.

20 de octubre, Meditación Diaria para Mujeres, libro: Cada día un nuevo comienzo:

…no puedes escoger cómo vas a morir, ni cuándo. Únicamente puedes decidir cómo has de vivir.

Joan Baez

Qué emocionante es darnos cuenta de que podemos elegir cada actitud que mostremos y cada acción que emprendamos. Somos totalmente responsables de nuestro de desarrollo. ¿Qué es lo que intentaremos hoy? Depende de nosotras. ¿Cómo decidiremos acerca de algún asunto concreto? Nuestras opciones sólo están limitadas por nuestra visión.

Cada situación de la vida nos da la oportunidad de tomar una decisión que necesariamente influirá en las demás situaciones que afrontemos. Del mismo modo que somos dependientes unos de otros y necesitamos a los demás al tiempo que influimos en ellos, nuestras decisiones nunca son inviolables. Cada una de ellas es importante en sí misma; sin embargo, su impacto se multiplica por todas las demás decisiones que ella misma provoca.

La decisión de vivir plenamente este día y de aprovechar todas las oportunidades que se nos presenten es nuestra. Nuestro crecimiento personal y nuestro desarrollo emocional y espiritual están en nuestras manos. Dios nos proporciona la orientación, mientras que el programa nos da las herramientas. Pero la decisión de actuar es sólo nuestra.

Voy a ejercer mi poder personal.

Mis decisiones determinan mi desarrollo.

 20 de octubre, El lenguaje del adiós de Melody Beattie

Desapégate con amor

A veces, la gente que amamos hace algo que no nos gusta o que no aprobamos. Reaccionamos. Reaccionan ellos. Antes de que pase mucho tiempo, todos estamos reaccionando unos hacia otros y el problema crece.

¿Cuándo nos desapegamos? Cuando estamos enganchados en una reacción de ira, miedo, culpa o vergüenza. Cuando quedamos enganchados en un juego de poder, un intento por controlar o forzar a los demás a que hagan algo que no quieren hacer. Cuando la forma como estamos reaccionando no está ayudando a la otra persona o solucionando el problema. Cuando la forma como ellos están reaccionando nos está lastimando.

Con frecuencia, es tiempo de desapegarnos cuando el desapego parece lo menos probable, o lo menos posible, que podemos hacer. El primer paso hacia el desapego es comprender que reaccionar y controlar no ayudarán. El siguiente paso es ponernos en paz, centrarnos y restaurar nuestro equilibrio. Da un paseo. Abandona una habitación. Asiste a una reunión. Date un largo baño de agua caliente. Llama a un amigo o amiga. Llama a Dios.

Respira profundamente. Encuentra la paz. De ese lugar de paz, al centrarte, surgirá una respuesta, una solución.

Hoy me someteré y confiaré en que la respuesta está cerca.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Meditaciones 24 de junio

Meditaciones 9 de abril

Meditaciones 15 de septiembre