Décimo Paso
Décimo Paso
Continuamos
haciendo nuestro inventario personal
y cuando
nos equivocabamos lo admitiamos inmediatamente
Admitir
cuando nos equivocamos
Con
frecuencia, he encontrado que simplemente asumir la responsabilidad, luego
pedir disculpas por mi conducta, es suficiente para dar por terminado los
asuntos que surgen. Las palabras,
"Me equivoqué y lo siento" son tan curativas. Poder dar o recibir estas palabras, y luego
soltar el incidente, es uno de los muchos regalos que he recibido en este
proceso llamado recuperación.
Mientras
crecía, pasé la mayor parte de mi vida castigando a las personas. Si ocurría una indiscreción, la archivaba durante
años y la usaba contra esa persona una y otra vez, a veces durante años y
años. Nunca soltaba nada.
Me
volví una persona castigadora. Si
alguien me desilusionaba o no hacía lo que yo pensaba que debían hacer, no sólo
me enojaba. Me aferraba al enojo y
castigaba. Y castigaba.
Así
también me trataba a mí misma cuando cometía algún error.
Me
mantenía alejada del amor y la alegría disponible para mí en las relaciones y
la vida. No sabía cómo aceptar,
perdonar, y nutrirme a mí misma. No
sabía cómo ni cuándo aceptar y perdonar a otros.
Décimo Paso de CoDA
Martin Klimas
Comentarios
Publicar un comentario