Libro, Cartas de las mujeres que aman demasiado, Robin Norwood

 ☼




 

Aún no he descubierto ninguna conducta poco honesta, abierta y afectuosa

entre seres humanos que no tenga sus raíces en el miedo: miedo a la vergüenza, el ridículo y la humillación, miedo al castigo, miedo a verse abrumado y sofocado, miedo al dolor físico o emocional, miedo a perder el control, miedo a la debilidad, miedo a la pérdida, miedo al abandono, miedo a la muerte. En cierta medida, cada uno de estos miedos es consecuencia inevitable del hecho de estar vivos y ser humanos. Pero cuando el miedo es demasiado intenso, la conducta resultante se vuelve exagerada, estereotipada y contraproducente. Es decir, cuando nos vence el miedo tendemos a regresar a una forma de conducta más primitiva. En lugar de elegir, con calma y a conciencia, palabras y acciones bien meditadas, objetivamente honestas y justas, capaces de lograr el objetivo que deseamos, tendemos a aferramos con desesperación, a atacar con ferocidad o a retirarnos ciegamente.


Libro, Cartas de las mujeres que aman demasiado, Robin Norwood




Comentarios

Entradas populares de este blog

Meditaciones 24 de junio

Meditaciones 9 de abril

Meditaciones 15 de septiembre