Mujeres que corren con los lobos
La naturaleza
salvaje jamás ahogaría por la tortura del cuerpo, la cultura o la tierra. La
naturaleza salvaje jamás accedería a vulnerar la forma para demostrar valor,
"dominio" y carácter o para ser más visualmente agradable o más
valiosa desde el punto de vista económico.
Una mujer no
puede conseguir que la cultura adquiera más conciencia diciéndole:
"Cambia." Pero puede cambiar su propia actitud hacia sí misma y hacer
que las proyecciones despectivas le resbalen. Eso se consigue recuperando el
propio cuerpo, conservando la alegría del cuerpo natural, rechazando la
conocida quimera según la cual la felicidad sólo se otorga a quienes poseen una
cierta configuración o edad, actuando con decisión y de inmediato recuperando
la verdadera vida y viviéndola a tope. Esta dinámica autoaceptación y
autoestima son los medios con los cuales se pueden empezar a cambiar las
actitudes de la cultura.
Mujeres que corren con los lobos, Clarissa Pinkola Estes
Ana Gesto
Comentarios
Publicar un comentario