La desesperación
A
cuántos de nosotros nos afecta L. Sin embargo, no nos damos
cuenta de que se debe nada más a la falta de fe. No podemos desesperar mientras
estemos dispuestos a volvernos hacia Dios en busca de ayuda en nuestra necesidad
extrema. Cuando, confundidos, no podemos ver un camino de salida, se debe a que
pensamos que las soluciones dependen de nosotros. Debemos recordar que nuestra sabiduría
humana y nuestro ingenio, con frecuencia no han producido los resultados anhelados.
Tal
vez nuestras cargas demasiado pesadas nos han hecho perder la fe que una vez teníamos
en un Poder Superior a nosotros. Probablemente la fe nunca formo parte de nuestra
vida y tampoco estamos convencidos de que la necesitamos.
En
el programa descubrimos que es posible demostrar la realidad y la eficacia de
la fe, como una fuerza que impulsa hacia el bien. Cuando dejamos que Dios
resuelva por nosotros un problema abrumador, descubrimos que ese Principio
Divino verdaderamente tiene una parte en nuestra vida.
Recordatorio de hoy
La
fe natural es realmente un don; sin embargo, es asequible a quienes necesitan
tener algo a que aferrarse. Cuando someto conscientemente mi voluntad a la
voluntad de Dios, veo que la fe obra en mi vida.
Me reconfortare en
una fe inconmovible porque sin ella quedare desvalido y solitario.
Un día a la vez
Sarah Anne Johnson
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