Meditaciones 14 de diciembre

 

14 de diciembre,

La meditación para las Mujeres que aman demasiado, Robin Norwood:

No importa cuán abiertas, tolerantes y auténticamente afectuosas nos volvamos con la recuperación, siempre habrá gente cuyo malhumor, hostilidad y agresividad nos inhiban de mostrar todas esas cualidades en su presencia. Ser vulnerables ante ellos es ser masoquistas. Por lo tanto, atenuar nuestros vínculos con ellos y finalmente eliminarlos es importante para poder mantener los establecidos con amigos, parientes o amantes y que se basan en la confianza, el amor, el respeto y la consideración hacia nuestra aún frágil recuperada humanidad.

Miedo al siguiente

Visto desde aquí, me parece evidente que no me puede volver a pasar, el problema es que cuando uno está dentro de la situación no puede ver nada claro. ¿Quién me iba a decir a mí, con el carácter que he tenido siempre, que me iba a dejar avasallar por un hombre de esa manera? En efecto, cuando se ven los toros desde la barrera, es muy fácil asegurar: «¡A mí nunca me pasaría nada parecido!», «¡yo no soy de esas!», «yo sabría hacerme respetar», o «yo no me dejaría engañar de esa manera». Sin embargo, es muy diferente estar enamorada hasta los tuétanos e implicada en una relación apasionada y destructiva de esas que prometen una felicidad que nunca llega. A nadie, en su sano juicio, se le ocurriría apostar, en frío, por una relación como las que hemos descrito en estas páginas. Nadie, en su sano juicio, elegiría conscientemente algo así para sí misma, sin embargo, todo cambia cuando se impone la pasión, entonces el juicio de realidad se nubla y se empieza a ver todo borroso.

Libro: Mujeres malqueridas: atadas a relaciones destructivas y sin futuro. Mariela Michelena,

14 de diciembre,

Meditaciones para mujeres que hacen demasiado, Anne Wilson Schaef

Fuerza

De ser una niña apocada y tímida me había convertido en una mujer de carácter resuelto, que ya no podía ser asustada por una lucha llena de dificultades.

Anna Dostoevsky

Descubrir y aceptar nuestra fuerza es un aspecto muy importante de conocernos a nosotras mismas como mujeres. Las adolescentes no conocen normalmente su propia fuerza, pero las mujeres si la conocemos. Cuando negamos nuestra fuerza, abandonamos partes de lo que somos nosotras. Cuando utilizamos nuestra fuerza para tener poder sobre las demás personas, negamos lo que ellas son. De cualquiera de las dos maneras, salimos perdiendo. Gran parte de nuestra fuerza proviene de conocernos y de aceptar que no somos el centro del universo. Cuando nos aceptamos a nosotras mismas, llegamos a darnos cuenta de que nuestra fuerza está directamente conectada – y es una- con un poder más grande que nosotras. Cuando llamamos a este poder, sabemos que tenemos toda la fuerza que necesitamos para cualquier cosa que suceda.

Como reza un antiguo proverbio etíope: Cuando la araña teje hilos bien unidos, puede atrapar a un león.

14 de diciembre,

Meditación Diaria para Mujeres, libro: Cada día un nuevo comienzo:

Puede parecer que un tema se ha dejado de lado, pero siempre vuelve. Tal vez modificado o incluso totalmente transformado, pero vuelve.

Muriel Rukeyser

Ninguna de las luchas que afrontamos es realmente nueva, sino es otro matiz de la batalla que nos atormentó la semana pasada o quizás el año anterior. Y tropezaremos una y otra vez hasta que aprendamos a dejar de luchar. Las situaciones molestas en el trabajo o el tipo de personalidad que nos irrita siempre existirán. Pero cuando lleguemos a aceptar todas las situaciones y a todas las personas como elementos positivos que enriquecen nuestro crecimiento, percibiremos la sutil ausencia de la lucha. Nos daremos cuenta de que la persona a quien no podíamos tolerar se ha convertido en nuestra amiga y que la situación que no podíamos manejar ha quedado resuelta para siempre. Las lecciones que necesitamos aprender seguirán presentándose por sí mismas hasta que hayamos terminado nuestros deberes. Si hoy percibimos una lucha, considerémosla como una tarea que favorece nuestro crecimiento. Recordemos que nuestras luchas representan nuestras oportunidades de desarrollo. Por fortuna, el programa nos ha dado un tutor. Tenemos la ayuda de un maestro siempre dispuesto. Necesitamos avanzar y abrirnos a otras tareas. Ningún problema supera nuestra capacidad de manejarlo.

Hoy disfrutaré de mi papel de alumna. Daré gracias por todas las oportunidades de crecer, pues me hacen posible ofrecer mi especial contribución a esta vida.

14 de diciembre,

El lenguaje del adiós de Melody Beattie

Un pensamiento claro

Esfuérzate por pensar claramente. Muchos de nosotros teníamos nublado el pensamiento por la negación. Algunos de nosotros incluso hemos perdido la fe en nosotros mismos porque nos hemos pasado cierto tiempo en un estado de negación. Pero perder la fe en nuestra forma de pensar no nos va a ayudar. En lo que necesitamos perder la fe es en la negación. No recurríamos a la negación -ya fuera del problema de alguna otra persona o nuestro- porque fuéramos deficientes. La negación, ese mecanismo que absorbe los golpes al alma, nos protege hasta que estamos equipados para lidiar con la realidad. Pensar claramente y estar en recuperación no significa que nunca recurriremos a la negación. La negación es el primer paso hacia la aceptación, y la mayor parte de nuestra vida estaremos luchando para aceptar algo. Pensar claramente significa que no debemos permitirnos caer en la negatividad o en expectativas irreales. Mantenemos contacto con otras personas que están en recuperación. Asistimos a nuestras reuniones, donde hay paz interior y un apoyo realista. Trabajamos los Pasos, rezamos y meditamos. Mantenemos una línea clara de pensamiento pidiéndole a nuestro Poder Superior que nos ayude a pensar claramente, y no esperando que El, ni nadie más, piense por nosotros.

Hoy me esforzaré por tener un pensamiento claro, equilibrado, en todas las áreas de mi vida.