Libro ¡No le llames más!No permitas que te siga haciendo daño.Autor: Rhonda Findling




MC


El hecho de no querer llamar a nuestro ex de forma compulsiva o aferrarnos a él cuando sabemos que la relación se ha terminado puede servir para enmascarar o anestesiar nuestros sentimientos de soledad, sufrimiento y profundo dolor. Lo mismo se aplica a aquellas mujeres que se encuentran en una relación o amistad nuevas y temen no volver a saber nunca más de su pareja. Cuando empezamos a llamar compulsivamente a un hombre por miedo a que nos abandone, puede que experimentemos una subida de adrenalina al pensar en verle o simplemente en oír su voz, pero debemos ser conscientes de que esta subida es temporal. El verdadero camino hacia una libertad emocional es sentir el dolor de su ausencia y analizarlo y trabajarlo por nosotras mismas o con la ayuda de un especialista.
Si existe alguna esperanza de que la relación pueda recuperarse, o lo que realmente queremos es mantenerla tal y como está, es importante recordar que una actitud desesperada y agobiante es motivo suficiente para que la mayoría de hombres se distancien todavía más. Este tipo de comportamiento te hace aparecer como si te creyeras indigna de ser amada y estuvieras agradecida por el hecho de que cualquier hombre se hubiera fijado en ti.
Libro ¡No le llames más!No permitas que te siga haciendo daño.Autor: Rhonda Findling


Comentarios

Entradas populares de este blog

Meditaciones 24 de junio

Meditaciones 9 de abril

Meditaciones 15 de septiembre