Paciencia y humildad

 

 



Paciencia y humildad

Paciencia. Como Dios está a cargo, Dios decide cuando y con que rapidez eliminara mis defectos de carácter. Hace un par de años, cuando le pedí con humildad que eliminara mi arrogancia, Dios procedió en primer lugar a demostrarme cuán terriblemente arrogante era yo y cómo afectaba eso mis relaciones de manera negativa. Pude aceptar que quizás lo haya solicitado con humildad de modo algo prematuro.

Senderos de recuperación


Comentarios

Entradas populares de este blog

Meditaciones 24 de junio

Meditaciones 9 de abril

Meditaciones 15 de septiembre