Sano juicio

 


 


Sano juicio

No estábamos orando correctamente. Siempre habíamos dicho: "Concédeme mis deseos" en vez de "Hágase Tu Voluntad". No apreciábamos en absoluto el amor humano y divino. Por eso permanecíamos engañados y desde luego incapaces de recibir la gracia suficiente para devolvernos el sano juicio.

Como Lo Ve Bill


Comentarios

Entradas populares de este blog

Meditaciones 24 de junio

Meditaciones 9 de abril

Meditaciones 15 de septiembre