El perdón
El perdón
El perdón viene a su tiempo —a su debido tiempo— si estamos luchando por cuidar de nosotros
mismos. No dejemos que otras personas usen este principio en contra nuestra. No dejemos que otras personas nos ayuden a sentirnos culpables porque piensan que debemos perdonar a alguien, y no estamos listos para
hacerlo o bien creemos que el perdón no es la solución adecuada. Asumamos la responsabilidad para
perdonar. Podemos prodigar nuestro perdón en forma apropiada basándonos en decisiones buenas, en una
alta autoestima y en el conocimiento del problema sobre el que estamos trabajando. No mal usemos el perdón
para justificar el hacernos daño a nosotros mismos; no lo mal usemos para ayudar a otras personas a que se
sigan dañando. Podemos trabajar nuestro programa, vivir nuestras propias vidas y dar los pasos cuarto y
quinto. Si estamos cuidando de nosotros mismos, comprenderemos qué es lo que debemos perdonar y cuándo es tiempo de hacerlo.
Mientras estemos en ello, no nos olvidemos de perdonarnos a nosotros mismos.
Ya no seas codependiente, Melody Beattie
Comentarios
Publicar un comentario