Noveno Paso

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‎Noveno Paso
“Enmendamos directamente el daño causado a aquellas personas siempre que nos fuera posible, excepto cuando el hacerlo perjudicaría a ellos o a otros”
Aunque parezca obvio que hay que enmendar directamente en una situación en la que podemos hacer daño, quizás tengamos preguntas sobre cómo hacer enmiendas"directas" cuando la personas a quien se las debemos ha muerto, o no sabemos dónde está o vive lejos. Hay muchas formas de hacer una enmienda directa sin hacerlo en persona. Si alguien a quien le debemos enmiendas ha muerto, quizás nos resulte muy útil escribir una carta que diga todo lo que diríamos si viviese. Después, a lo mejor, podríamos leérsela a nuestro padrino o madrina. Puede que sea noble el deseo de querer hacer una enmienda en persona a alguien que vive a miles de kilómetros de distancia, pero la mayoría carecemos de medios para viajar grandes distancias solamente con este objetivo. En tales situaciones, una llamada telefónica o una carta podría servir al mismo propósito que una enmieda hecha en persona. Las personas de nuestra lista que no sabemos dónde encontrar deben seguir en la lista. Puede que se presente una oportunidad para enmendar más adelante, años más tarde incluso. Mientras tanto, debemos seguir dispuestos a hacer tales enmiendas. Naturalmente, nunca hay que evitar una enmienda en persona sólo porque tenemos miedo de enfrentarnos a alguien a quien hemos hecho daño. No escatimamos esfuerzos para encontrar a la gente a la que lastimamos, y en hacer las mejores enmiendas que podamos.

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