Meditaciones 27 de agosto
👣 👣 👣
27 de agosto, La meditación para las Mujeres que aman demasiado, Robin Norwood:
Si eres una mujer golpeada, considera la posibilidad de aplicar a tu conflicto el concepto de adicción a una relación afectiva, que tiene su origen en un trauma infantil, para que te ayude a enmendar viejos errores, para ti y para tu estado. El hacerlo así te permitirá comenzar con tu propia recuperación, en lugar de esperar que sea él quien cambie.
Aprender
a quererse
Hemos
empezado a ver que la voluntad de Dios para con nosotros es la capacidad de
vivir con dignidad, de amarnos a nosotros mismos y amar a los demás, de reír y
de encontrar mayor gozo y belleza en lo que nos rodea.
Funciona,
Undécimo Paso
Pensaré
en mi bienestar físico, emocional y espiritual y revitalizaré mi rutina
matinal. Dedicaré tiempo a reflexionar conscientemente sobre la abundancia que
la recuperación ha traído a mi vida.
Un
principio espiritual por día
27
de agosto
Meditaciones
para mujeres que hacen demasiado, Anne Wilson Schaef
Soledad
Por
haberse separado de su fuente interna de poder, realmente se sienten solas y
perdidas.
Shakti
Gawain
Como
dice Norma Jean Harris en la novela Norma Jean, la reina de las termitas, de
Sheila Ballantyne: «¿Cómo puedes plantear una pregunta, por ejemplo, a alguien
que no está ahí?» Cuando pensamos qué es lo que falta en nuestras vidas, tal
vez llegamos a la conclusión de que ¡somos nosotras! Oh, desde luego
funcionamos bien. Hacemos lo que hay que hacer. Incluso somos eficientes e
imaginativas en ocasiones, pero muchas veces nos sentimos como zombis llevando
nuestra rutina sobre raíles bien engrasados. Hemos perdido el contacto con
nosotras mismas, y no hay nada más solitario que esto. Cuando hemos perdido el
contacto con nosotras mismas, nada externo nos puede ayudar. Esposos, amigos/
as, trabajo... nada puede sustituir lo que falta cuando nos hemos separado de
nuestra «fuente interna de poder». Faltamos nosotras, y la única manera de
remediar este problema es encontrarnos de nuevo. Encontrarnos toma tiempo. Es
un arduo trabajo y vale la pena hacerlo.
Yo
buscaba por todas partes lo que faltaba en mi vida, y entonces descubrí que era
yo.
27
de agosto, Meditación Diaria para Mujeres, libro: Cada día un nuevo comienzo:
Aceptación
no es lo mismo que sumisión; aceptar es reconocer los hechos de una situación y
decidir lo que vas a hacer al respecto.
Kathleen
Casey Theisen
La
recuperación nos da el valor de decidir acerca de los sucesos de nuestra vida.
La sumisión pasiva ante lo que ocurre, sin importar lo que sea, no tiene por
qué seguir dominando nuestro patrón de conducta. Para muchas de nosotras era
usual ver impotentes cómo transcurría nuestra vida, y cuanto más inactivas
permanecíamos, más aumentaba nuestra sensación de impotencia. Hoy se nos exige
actuar inteligentemente en respuesta a las situaciones que requieren nuestra
atención. El mayor don de la recuperación es el valor para actuar y para tomar
decisiones que nos beneficiarán a nosotras y a las personas que nos rodean. El
valor es una consecuencia de nuestro progreso espiritual; valor para aceptar lo
que no podemos cambiar y valor para transformar en nosotras aquello que sí
podemos controlar. La acción produce una sensación vivificante. Entonces se
rompe el hechizo de la inacción y las acciones posteriores nos resultan más
fáciles de realizar. Tomar una decisión y actuar en consecuencia es algo
saludable. Y el programa nos da las herramientas para hacer ambas cosas.
Hoy
deberé tomar decisiones. Seré paciente conmigo misma y actuaré con
inteligencia. Escucharé atentamente la orientación que me proporcionen las
personas que me rodean.
27
de agosto, El lenguaje del adiós de Melody Beattie
Negligencia
La
negligencia –no actuar en el momento oportuno- es una conducta autoderrotista.
Produce ansiedad, culpa, desarmonía y que tengamos una machacona conciencia de
la tarea que la vida nos está diciendo que es tiempo de hacer. No siempre
estamos siendo morosos cuando dejamos algo para después. A veces, hacer algo
antes del momento preciso puede ser tan contraproducente como esperar
demasiado.
Podemos
aprender a discernir la diferencia. Escúchate a ti mismo. Escucha al universo.
¿A qué se le ha pasado ya el tiempo de que lo hicieras y te está creando
ansiedad y te está aguijoneando por dentro? ¿Hay algo en tu vida que estés
evitando porque no quieres enfrentarlo? ¿Se está haciendo cada vez más grande
la ansiedad por estarlo posponiendo? A veces, la ira, el miedo o el sentirse
impotente puede motivar la negligencia. A veces, la negligencia simplemente se
ha convertido en algo habitual.
Confía
en ti mismo y escúchate a ti, a tu Poder Superior y al Universo. Vigila los
signos y señales. Si es tiempo de hacer algo, hazlo ahora. Si aún no es tiempo,
espera hasta que sea el momento oportuno. Dios mío ayúdame a estar a tiempo y
en armonía con mi vida. Ayúdame a sintonizarme al Divino Orden y a la Divina
Regulación del Tiempo y a confiar en ellos.
Comentarios
Publicar un comentario